Antonio Isa Conde. (Ilustracion: El Nuevo Diario)
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO. – Este martes la República Dominicana perdió a uno de sus más destacados hijos: Antonio “Tony” Isa Conde, exministro de Energía y Minas, político, abogado y empresario cuya vida fue un constante compromiso con la justicia social y la participación ciudadana.
Nacido el 14 de marzo de 1940 en San Francisco de Macorís, Isa Conde fue mucho más que un funcionario público; fue un hombre de convicciones firmes y de amplia formación académica. Doctor en Derecho por la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), complementó sus estudios en la Universidad de Roma, Italia donde profundizó en administración, banca, política industrial y consultoría empresarial. Este bagaje académico lo acompañó durante toda su vida, nutriendo su visión crítica y multidisciplinaria.
Desde su juventud Tony Isa Conde estuvo inmerso en la lucha social. Fue miembro fundador de la Federación de Estudiantes Dominicanos (FED) y del primer Consejo Provisional de la UASD, espacios donde germinaron sus ideales y su pasión por el cambio. No se limitó a las aulas: fue activista incansable, cofundador del Movimiento Cívico Participación Ciudadana y de la Red Ciudadana de Observadores Electorales, contribuyendo a fortalecer la democracia y la transparencia en el país.
Su trayectoria en la administración pública reflejó su compromiso por servir al pueblo dominicano desde cargos clave: subsecretario de Industria y Comercio, director ejecutivo del Consejo Estatal del Azúcar, presidente de la Comisión de Reforma de la Empresa Pública, asesor industrial con rango de secretario de Estado, y finalmente, ministro de Energía y Minas entre 2015 y 2020. Cada puesto fue una oportunidad para impulsar reformas y políticas que marcaron la diferencia en sectores fundamentales para el desarrollo nacional.
Pero su legado no se limitó al sector público. En la empresa privada, Isa Conde también dejó una huella imborrable como gerente general de Delta Comercial, administrador de Textiles Titán y presidente de la Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Santo Domingo, demostrando su capacidad de liderazgo y su compromiso con el progreso desde múltiples frentes.
En su autobiografía Relatos de la vida de un desmemoriado, Antonio Isa Conde plasmó más de 50 años de vivencias, incluyendo su participación en la Revolución de Abril de 1965, así como sus luchas y triunfos como dirigente y servidor público. Un testimonio que revela la profundidad de un hombre que dedicó su vida a construir un país más justo y transparente.
Hoy, al recordar a Tony Isa Conde, la sociedad dominicana honra a un referente de integridad, compromiso y valentía. Su legado perdurará en la memoria colectiva y seguirá inspirando a las nuevas generaciones a luchar por la justicia social y la democracia.
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