DEIR AL-BALAH, Franja de Gaza (AP) — Ataques aéreos israelíes mataron al menos a 28 palestinos, incluidos cuatro niños, en la Franja de Gaza, mientras que otros 24 fueron asesinados a tiros cuando se dirigían a un sitio de distribución de ayuda, dijeron el sábado funcionarios y testigos de hospitales palestinos.
Las últimas muertes se produjeron después de que no hubiera señales de un avance en las conversaciones de alto el fuego después de dos días de reuniones entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu. Trump había dicho que se estaba acercando a un acuerdo entre Israel y Hamas que llevaría a la liberación de más rehenes de Gaza y potencialmente reduciría la guerra. El grupo militante aún tiene unos 50 rehenes, y se cree que al menos 20 siguen vivos.
Los cuatro niños se encuentran entre las al menos 13 personas que murieron en Deir al-Balah, en el centro de Gaza, en los ataques aéreos que comenzaron el viernes por la noche, dijeron funcionarios del Hospital de los Mártires de Al-Aqsa. Otras 15 personas murieron en Khan Younis, en el sur, según el Hospital Nasser. El ejército israelí no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Los intensos ataques aéreos continuaron el sábado por la noche en Gaza.
Más asesinatos cerca de un centro de ayuda estadounidense
La guerra de 21 meses ha dejado a gran parte de la población de Gaza, de más de 2 millones de habitantes, dependiendo de la ayuda externa, mientras que los expertos en seguridad alimentaria advierten de hambruna. Israel bloqueó y luego restringió la entrada de ayuda después de poner fin al último alto el fuego en marzo.
Los 24 muertos a tiros se dirigían a un sitio de distribución administrado por una organización estadounidense respaldada por Israel cerca de Rafah, en el sur de Gaza, dijeron funcionarios del hospital y testigos. El ejército israelí dijo que disparó disparos de advertencia contra personas que, según dijo, se comportaban de manera sospechosa para evitar que se acercaran. Dijo que no estaba al tanto de ninguna víctima.
La Fundación Humanitaria de Gaza dijo que no se produjo ningún incidente cerca de sus sitios.
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Abdullah al-Haddad dijo que estaba a 200 metros (655 pies) del sitio de distribución de ayuda administrado por el GHF cerca del área de Shakoush cuando un tanque israelí comenzó a disparar contra multitudes de palestinos.
«Estábamos juntos y nos dispararon de inmediato», dijo, retorciéndose de dolor por una herida en la pierna en el Hospital Nasser.
Mohammed Jamal al-Sahloo, otro testigo, dijo que el ejército israelí les había ordenado que se dirigieran al lugar cuando comenzó el tiroteo.
El hijo de 17 años de Sumaya al-Sha’er, Nasir, murió en el tiroteo, dijeron funcionarios del hospital.
«Me dijo: ‘Mamá, no tienes harina y hoy voy a ir a traerte harina, aunque me muera, iré a buscarla’», dijo. «Pero nunca volvió a casa».
Hasta entonces, dijo, había impedido que el adolescente fuera a los sitios de GHF porque pensaba que era demasiado peligroso.
Testigos, funcionarios de salud y funcionarios de la ONU dicen que cientos de personas han muerto por fuego israelí mientras se dirigían hacia los puntos de distribución de GHF a través de zonas militares fuera del alcance de los medios independientes. El ejército ha reconocido haber realizado disparos de advertencia contra los palestinos que, según dice, se acercaron a sus fuerzas de manera sospechosa.
La GHF niega que haya habido violencia en sus sitios o alrededor de ellos. Pero dos de sus contratistas dijeron a la AP que sus colegas han disparado munición real y granadas aturdidoras mientras los palestinos luchan por comida, acusaciones que la fundación negó.
En un esfuerzo separado, la ONU y grupos de ayuda dicen que tienen dificultades para distribuir ayuda humanitaria debido a las restricciones militares israelíes y a la ruptura de la ley y el orden que ha llevado a saqueos generalizados.
El primer combustible, 150.000 litros, ingresó a Gaza esta semana después de 130 días, según un comunicado conjunto de los organismos de ayuda de la ONU, que lo calificó como una pequeña cantidad para «la columna vertebral de la supervivencia en Gaza». El combustible hace funcionar hospitales, sistemas de agua, transporte y más, según el comunicado.
Los militantes liderados por Hamas mataron a unas 1.200 personas en su ataque contra Israel del 7 de octubre de 2023 que desencadenó la guerra y secuestró a 251.
La ofensiva de represalia de Israel ha matado a más de 57.800 palestinos, más de la mitad de ellos mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza. El ministerio, que depende del gobierno de Hamas en Gaza, no diferencia entre civiles y combatientes en su recuento. La ONU y otras organizaciones internacionales consideran que sus cifras son las estadísticas más fiables sobre las víctimas de guerra.
Un palestino-estadounidense asesinado en Cisjordania
Amigos y familiares presentaron sus respetos un día después de que el palestino-estadounidense Seifeddin Musalat y su amigo local Mohammed al-Shalabi fueran asesinados en la Cisjordania ocupada por Israel por colonos israelíes, según el Ministerio de Salud palestino.
Musalat fue golpeado hasta la muerte en las tierras de su familia, dijo su prima Diana Halum a los periodistas. Luego, los colonos impidieron que los paramédicos llegaran a él, dijo.2
Musalat, nacido en Florida, estaba de visita en la casa de su familia y llegó el 4 de junio. «Era un joven amable, trabajador y profundamente respetado», dijo Halum.
La familia Musalat exige que el Departamento de Estado de Estados Unidos investigue su muerte y responsabilice a los colonos. El Departamento de Estado dijo que estaba al tanto de los informes de su muerte, pero no hizo comentarios por respeto a la familia.
Un testigo de la golpiza, que habló bajo condición de anonimato para evitar represalias israelíes, dijo que los colonos descendieron a tierras palestinas y «comenzaron a dispararnos, golpeándonos con palos y arrojando piedras».
El ejército israelí ha dicho que los palestinos habían arrojado piedras a los israelíes en la zona el viernes temprano, hiriendo levemente a dos personas y desencadenando una confrontación mayor.
Los palestinos y los grupos de derechos humanos han acusado durante mucho tiempo a los militares de ignorar la violencia de los colonos, que se ha disparado, junto con los ataques palestinos y las redadas militares israelíes, desde que comenzó la guerra en Gaza.
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